Customización, gracias

¡Qué grandes son algunas estrategias! Ayer, dispuesta a vestir mi armario para este verano, caí en la sección de ropa de playa de varias cadenas de moda. Bien, consumí en H&M y os cuento por qué.

Tras dar varias vueltas por muchas tiendas, todas tenían lo mismo: estampados más o menos monos, los cortes que se llevan este año, etc. ¡Pero lo que ofrecía la cadena sueca era mucho mejor! Por eso la consumí y muchas mujeres (léase muchas guiris que pasan por Alicante) también.

1. El producto, sin ser algo completamente innovador, sí era bastante diferente al de otras tiendas.
2. Es un producto conocido que ya está en nuestra retina porque, yo por lo menos, lo he visto en tv y gráfica; mientras que de otras cadenas, no.
3. Es un producto barato, unos cuantos euros más barato que en otras cadenas.
4. Y lo mejor es que es customizable. No te obligan a coger el bikini completo. Una mujer puede escoger las piezas como quiera: intercambiando tallas o colores.

A todos nos gusta sentir que algo es sólo nuestro. Nos gusta y nos cae simpática la marca que nos ayuda a conseguirlo. Y si además, piensa en nosotros y nos da ese valor añadido de no obligarte a coger un pack completo que te satisface a medias, te dejan elegirlo como quieras.


Conclusiones: están llenando sus establecimientos de compradoras. Al ser todo intercambiable, hay gente que no adquiere dos piezas, sino más. Y están fidelizando clientas para próximas temporadas.
¿Que salen perdiendo porque les va a quedar stock? Seguro, y si no se lo ventilan en rebajas, seguro que han calculado el precio para salir beneficiados.